Mis hijos empezaron las clases el lunes y yo, al contrario de mi madre, me he despedido definitivamente de las vacaciones.
He vuelto al “pluriempleo”, soy taxista (del Judo a música, pasando por casa de la amiga de Gadea), guardia civil (controlo los uniformes, los babis, las mochilas, los deberes), tavernera ( se puede quedar Mateo a cenar? Si se queda Mateo, puede quedarse también mi amigo Simone? no es justo que Beltrán pueda y yo no).
En fin, esta semana ha sido larguísima y para colmo, hoy llueve. He tenido que abandonar las sandalias.
Para compensar la incomodidad y acostumbrar a mis pobres dedos al encierro invernal he decidido usar los zapatos amarillos. Aunque son de ante, me han asegurado en la tienda que aguantan muy bien el agua ( el invierno pasado comprè otros mocasines de color gris hielo de la misma marca y han soportado de todo, todavia estan estupendos.
y aqui el "Polivory" vereis que los zapatos y el bolso no se parecen en nada a los que use, lo del bolso lo entiendo, lo de los zapatos me preocupa, empiezo a pensar que si no he encontrado un par de mocasines de este color entre todos los zapatos a disposicion quiere decir que me he comprado un par de zapatos absolutamente "old fashion" BOH!!! a mi me gustan!!!!